Muchos de los infortunios que nos atacan son imprevisibles, pero otros son predecibles y podemos preparamos de antemano para enfrentarlos. Lo importante es no desesperamos o entrar en pánico, porque así una adversidad se convierte en desastre y sobreviene la catástrofe.

El propósito de este libro es ofrecer un conjunto de herramientas que le permitan enfrentar de la mejor manera posible las desgracias. Si no podemos impedirlas, por lo menos podemos abordarlos con la ayuda de recursos que neutralicen sus efectos destructores o disminuyen sus daños. Son 50 estrategias para enfrentar la crisis, algunas generales, otras especificas, como pueden ser la pérdida del empleo, una crisis matrimonial o tener que lidiar con un hijo problemático.

He seleccionado las estrategias que me parecieron más útiles y efectivas. En realidad, la mejor estrategia es aquella que funcione en usted. No se cual podría serle útil, pero es posible que la descubra entre estas 50. Lo importante es no resignarnos a la calamidad ni perder la esperanza.

Espero que encuentre en este libro la solución que usted necesita.